viernes, 18 de mayo de 2012

500 días juntos.

Es definitivo. Lo veo claro. Me he enamorado de ti. Me encanta tu sonrisa, esa forma de mirar que tienes. Tu personalidad y tu estilo único. El sonido de tu risa al otro lado del teléfono. Adoro el sonido de tu voz y escuchar un pequeño suspiro tuyo antes de hacerla sonar. Me gusta verte feliz. No sé. Me haces sentir mil cosas en un segundo durante todos los segundos de mi vida sin llegar a cansarme. Le das sentido a todo lo que hay alrededor sin que lo tenga. Pones una historia a cada momento. Me gusta picarte y que nos peleemos durante dos minutos como mucho. Me encanta cuando suena esa canción que compartimos cada vez que pienso en ti. Me tranquiliza tenerte cerca. Mirarte para sonreírte y que tú ya lo estés haciendo. Es extraño. No sé ni si quiera lo que somos pero, no me importa, estoy feliz. No siento curiosidad por saberlo, sólo quiero que estés a mi lado. Tampoco sé si una mañana vas a despertarte y vas a cambiar de opinión sobre todo esto, si le pondrás un punto y final y ya no habrá más momentos con historias. No podemos prometer que siempre va a ser como ahora ni que esto que está pasando ahora va ser para siempre. Nadie puede hacer eso. Quizás fallemos y luego hagamos como si nada de esto hubiera pasado y seguramente estaremos sin hablarnos un largo, largo tiempo pero, después nos reiremos. Nos reiremos de todas las gilipolleces que estamos cometiendo y de la tontería que acabará con todo. Sólo sé, que no sé nada y que, lo único que quiero ahora, es que esa tontería que acabe con todo, no sea otra que la muerte.
-Believe me when I say I love you.

No hay comentarios:

Publicar un comentario